Por un lado, nos ayuda a la transmisión oral de nuestras tradiciones y el patrimonio cultural de Asturias acercando las distintas generaciones a través de los juegos.
Y por otro lado, aprovechamos para hacerlo en un entorno natural trabajando también de esta forma la educación ambiental y haciendo partícipes a los niñós y niñás de suy proipio aprendizaje.
Y por otro lado, aprovechamos para hacerlo en un entorno natural trabajando también de esta forma la educación ambiental y haciendo partícipes a los niñós y niñás de suy proipio aprendizaje.
Hemos jugado a la peonza, las chapas, el "cascayu", las canicas, las carreras de sacos, el escondite, la petanca, etc...
Algunas fotos:
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